Agencias
En un acto lleno de emoción, la selección de Portugal develó una estatua de Diogo Jota en la Plaza de los Héroes, como reconocimiento a su legado en la historia reciente del fútbol portugués. El homenaje, que incluyó la presencia de su familia, fue un emotivo tributo tanto institucional como personal.
El presidente Marcelo Rebelo de Sousa, Cristiano Ronaldo y Rúben Neves estuvieron presentes en el homenaje a Diogo Jota, destacando su impacto tanto en lo deportivo como en lo humano. Neves, amigo cercano de Jota, se comprometió a mantener vivo su legado vistiendo el número 21 y mostrando un tatuaje en su honor.
El homenaje a Diogo Jota no solo fue un acto deportivo, sino un tributo emocional a su legado como jugador, amigo y ejemplo de pasión por el fútbol. La selección portuguesa, al igual que los aficionados, seguirá recordando su impacto dentro y fuera del campo.