Agencias
Adela Micha es considerada como una de las periodistas mexicanas con mayor presencia a nivel nacional gracias al carisma y profesionalidad que imprime en sus programas. Durante su trayectoria en medios de comunicación ha trabajado con varias empresas, pero sin lugar a dudas la más importante fue Televisa por los años que permaneció entre sus filas.
La periodista se consagrado como uno de los rostros más reconocidos de la televisora de San Ángel, pero sorpresivamente fue despedida en 2016 por razones poco conocidas. Siete años después de su salida abrió su corazón con Franco Escamilla para contarle cómo fue desde su llegada hasta el día en que le dijeron adiós.
Para comenzar, confesó que “mientras se casaba” estudió Periodismo en una universidad que actualmente ya no existe. Como parte de sus actividades académicas solía visitar museos y fue en uno de estos espacios donde se encontró con un productor que estaba realizando contendido.
Sin dudarlo se acercó para ver cómo era el proceso y le pasaron el contacto. Así pasó el tiempo hasta que en determinado punto de la carrera le pidieron cubrir horas en televisión y les escribió para ver si podían ayudarla; lo demás es historia: “Nunca Más volví a salir de ahí hasta 33 años después.
Yo cargaba cables como asistente de producción”. Contó que tan solo unos días después se encontró con Jacobo Zabludovsky, quien le ofreció participar en un noticiero de “puros chavos” y sin pensarlo dos veces aceptó hacer el casting: “No iba para eso, yo iba a cumplir con las horas de la escuela”. Adela Micha quedó en el equipo que no duró mucho tiempo, pues el programa se disolvió por el temblor que sacudió a México en 1985. Y es que en ese momento se necesitaban reporteros para cubrir en las zonas afectadas, por lo que ellos fueron los primeros en salir a la calle. La periodista aseguró que esa primer experiencia que tuvo fue muy dura por todo lo que implicó.