Melhem y GuevarA
José Ángel Solorio Martínez
El PRI panófilo, recibió un duro revés, con el desplazamiento de la lista de los candidatos plurinominales electos, del mantense, Alejandro Guevara Cobos. Sin este personaje, que ha tenido una estrecha relación política con el panismo tamaulipeco, –y que impulsaba e impulsa con énfasis, la coalición PAN-PRI para el 2022– queda la ruta limpia, para que se consolide el liderazgo del grupo parlamentario priista del riobravense, Edgar Melhem Salinas. El impacto de la ordenanza de la máxima autoridad electoral del país (TRIFE), desangra, debilita en mucho, la estrategia azul para ir a la elección venidera con un bloque competitivo contra un frente MORENA-PT-PV que se percibe robusto y potente. Eso es, en el mediato plazo. En el plano inmediato, amaciza la conducción de la micro fracción parlamentaria de Melhem que ya ha lanzado guiños a la mayoría lopezobradorista en el parlamento local. (Fustigó a las diputadas que emigraron de los espacios guindos al manto azul, con mayor energía que los mismos parlamentarios morenistas). De otra forma: sin el contrapeso que le habían construido a Edgar -Guevara Cobos-, el aún Presidente del Comité Directivo Estatal tricolor recompone su protagonismo. Esa nueva circunstancia, –y la nacional, que hace suponer lo evidente: el CEN del PRI apuntalaría las reformas constitucionales; sobre todo la Energética, cuyo centro de atención son el Litio y la Energía eléctrica– está generando dos fuerzas al interior del priismo: una centrífuga que aleja al institucional del PAN y otra centrípeta que está siendo atraída por el núcleo de la IV T. Edgar tiene mucho con que respaldar la sana distancia del panismo regional: se le soslayó de una rentable coalición en la pasada elección de este 2021 –la opinión azul, consideró innecesario ir de la mano de los tricolores por alcaldías y diputaciones locales y federales–; se maquinó un plan para fracturar su conducción en el CDE: alquilaron los servicios de Tino Sáenz Cobos para pervertir el grupo parlamentario priista que ya ha sido reemplazado y finalmente delinearon la estrategia para romper la autoridad de Melhem ante sus legisladores de partido y difuminar su fuerza con el accionar de Guevara Cobos. Si el riobravense, es capaz de leer, con certeza el escenario sobre el cual se mueve su partido y muestra talento para desplegar su labor en el Congreso, podría convertirse en uno de los mejores diputados del PRI, que este partido haya tenido en muchos lustros.