Estamos viviendo, a fuerza, una nueva era donde la tecnología, la disciplina ciudadana y la solidaridad nos salvarán.
Mientras la bio medicina y otras ciencias encuentran la cura al Covid-19, tratamos desesperadamente de ser resilientes: un joven sube diariamente a un árbol para captar señal de Internet y hacer su tarea, otro se sienta en la banqueta de un servidor de telefonía móvil con la misma finalidad, una niña se puso su uniforme escolar, se sentó frente a la televisión y atendió sus clases…
Por su parte, los trabajadores de la cultura oficial en este país, los que tuvieron la posibilidad tecnológica de hacerlo, se lanzaron a la alberca tecnológica con ofertas muy atractivas, en muchos casos, no en todos y no solo por la calidad de su producto cultural, sino por el manejo que tienen o que no tienen de las redes sociales, y de sus posibilidades reales de acceso a Internet.
Van algunos casos, Andrea Bocelli dio un bellísimo concierto de Pascua en el duomo de Milan, Italia y lo transmitió vía Facebook Live. “Contigo a la distancia” de la Secretaría de Cultura Federal maneja desde hace un mes una cartelera impresionante por su calidad y por el apoyo tecnológico, canalizaron en un primer momento, a artistas ya programados por la SEC para actividades presenciales y el miércoles 22 de abril publicaron los resultados de la convocatoria para artistas que quieren tener esta experiencia de encierro.
La Universidad de Guadalajara dio un giro social a esta posibilidad de seguir conectados por la red.
Varios artistas lanzaron programas, cursos, conferencias, muestras artísticas en sus muros de www.facebook.com, canales en www.youtube.com y otros foros, en la región la pintora, profesora y promotora cultural Paty G. Santiago es una de ellas.
Mientras que la Secretaría de Cultura de Coahuila lanzó cultura en línea, a través de www.coahuilacultura.gob.mx, todos los días programan un promedio de 6 actividades entre talleres, cuenta cuentos, libros para descarga, pequeños conciertos de orquestas, cuartetos, entre otras.
He visto ahí a la Camerata de Coahuila con fragmentos de su concierto por los 90 años del teatro “Isauro Martínez”, a la Orquesta Filarmónica del Desierto, a la cantante lagunera Alicia Irigoyen Pons, al trovador Juan Carlos Esparza, a Norberto Treviño del taller “El Chanate” y a Arturo García con talleres sencillos y muy divertidos de origami y grabado, a cuenta cuentos, dibjuantes de Saltllo, Monclova, Piedras Negras y La Laguna como Cruz Almonte y Juan Huerta.
Técnicamente hay mucho por hacer, todo esto es nuevo para casi todos, hay charlas como las de Gerardo Kleiburg, desde la CdMx o el concierto del joven pianista Alejandro Vela, auspiciado por el Ayuntamiento de su natal Piedras Negras, que son verdaderas joyas.
A nivel nacional, la subsecretaría de Cultura, Marina Núñez Bespolova, dijo el martes 21 de abril que se está viendo la posibilidad de que una vez pasada la contingencia sanitaria, se mantenga el programa y en Coahuila me da la impresión de que los mismos creadores comenzarán a hacer suyo el programa, como el cuarteto que se desprende de la orquesta del Desierto y tocó en una banqueta… genial, cuando gobierno y ciudadanos conjuntan esfuerzos y talentos, el resultado llega solo y rápido… genial.
NOTICIAS DEL SOL DE LA LAGUNA.